miércoles, 26 de noviembre de 2008

doce minutos

Con tu mano...
graba un poco en mi mejilla,
esos momentos tan fugaces,
y detengamos un poco,
los instantes tan felices
esas risas tan dispares
las maneras tan absurdas,
y de repente, sentirás que es muy de prisa,
y que en cambio son bastantes,
las miradas, los matices,
el aire en tu cabello,
mis dedos en mi abrigo,
la figura larga, ensimismada,
un té...y la película.
Me voy a dormir ahora,
es de madrugada
y sin embargo en las palabras,
es un día eterno, es un verano,
como aquellos cálidos, como aquellos viejos,
y el recuerdo se vuelve un no se qué desparramado,
que sabe a antiguo con algo de nuevo,
y sin embargo sabemos, que hay algo distinto...
talvez es sincero, talvez es mentira,
pero pasa en la entraña, en la víscera negra,
y se vuelve tormento, luego añoranza
y en las manos vacías, como que se vuelve anhelo.

No hay comentarios: