miércoles, 14 de octubre de 2009

érase una vez...

una casa
una ventana para ver dibujadas las nubes
una taza pequeña para tomar un espresso
una taza más grande para tomar un té de manzanilla, azucarado
un par de zapatillas suaves
una almohada tibia para escuchar por las noches
unas botellas de vino, tinto
un jabón
una alfombra grande para mirar al techo desde allí...
una tarde larga con un sol dorado que besa lentamente
una mano
unos dedos
unos ojos
una puerta
una casa

No hay comentarios: